Cada año seleccionamos los mejores mostos que entran en bodega para elaborar este vino. Tras su fermentación alcohólica en acero inoxidable, lo criamos largamente en depósito, para, una vez decantado, mantenerlo en largo y sosegado reposo durante cerca de dos años. Lo sometemos luego a crianza oxidativa en barricas de 500 l. para, finalmente, embotellarlo en su momento óptimo.
Selecta nariz de Albariño compuesta de fruta madura y cítricos, compotas y mieles. Acidez marcada, envuelta en la untuosidad y calidez que desarrolla.